siempre estoy pensando
no me sorprendería darme cuenta un día
que en toda mi vida
no moví los labios,
la boca,
que nunca enuncié palabra con el mundo y todo ocurría en mi cabeza
¡pienso demasiado!
En un instante pasé del camino al abismo, ahí caí y sentí lo que en tanto no había podido. Dos luces se han presentado y ante ello me he ent...